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Ametralladora Maxim M1910/30.
Museo Histórico Militar “El Desnarigado” | 22-07-2021
En esta ocasión, queremos presentar como “fondo del mes”, del Museo de Historia Militar de Ceuta, un arma muy característica de nuestra guerra civil, que puede considerarse incluso emblemática para el ejército popular republicano, es la ametralladora soviética Maxim modelo 1910/30 (la primera ametralladora automática portátil) muy extendida y apreciada por los combatientes de ambos bandos de nuestra contienda y que hoy en día, puede ser considerada una de las ametralladoras más míticas de la historia militar del siglo XX. Su historia comenzó, cuando Hiram Stevens Maxim, un ingeniero e inventor estadounidense nacionalizado británico, mostró personalmente a los zares la ametralladora fabricada por él en San Petersburgo en 1887. Su demostración tuvo gran éxito, y entonces el ejército zarista compró varias unidades fabricadas en Inglaterra. Después de un acuerdo, el arma comenzó a fabricarse en 1905 en los talleres del Arsenal de Tula. En el año 1910 fue adoptado un modelo con ligeras mejoras, calibrado para la munición estándar rusa 7,62 x 54 R. La ametralladora M1910 iba montada sobre un voluminoso afuste con ruedas y un escudo protector, la cual fue reemplazada por la SG-43 Gorjunov a partir de 1943. Y aparte de la versión para infantería, poseía versiones aéreas (PV-1) y navales. Esta ametralladora automática dejó obsoletas a las ametralladoras accionadas con manivela como las Gatling. Por lo que muchos estados europeos la adquirieron y diseñaron a partir de esta sus propios modelos. Podríamos destacar la MG-08 alemana y la Vickers de 1912 británica. La ametralladora Maxim es un arma refrigerada por agua, que funciona por el principio del retroceso de masas de recorrido corto. Aunque su mecanismo no era el más simple, era sin embargo muy eficaz y fiable. Se alimentaba mediante cintas de lona reforzada con placas y remaches metálicos, de 250 cartuchos. La producción del arma en las fábricas rusas mejoró el peso final en comparación con las primeras versiones producidas en Inglaterra. Con todo, debido a su gran peso, los rusos desarrollaron un sistema de afuste y transporte diseñado por Sokolov, que consistía en un carro tubular con dos ruedas delanteras y un sistema de arrastre en forma de U, que además servía como base de disparo. Las ruedas eran desmontables y se podían sustituir por esquís para ser transportada por la nieve en invierno. La base contaba asimismo con un escudo desmontable de protección contra proyectiles de infantería. Aunque el mecanismo básico de la ametralladora se mantuvo a lo largo de su fabricación, se efectuaron diversas mejoras y modificaciones, tales como cintas de alimentación simplificadas y un sistema de miras y sistemas telescópicos indirectos para mejorar la puntería. Las últimas modificaciones se hicieron a principios de la década de 1940 como consecuencia de la “Guerra de Invierno” (1940) con Finlandia, con cambios de diseño de la camisa de enfriamiento -que pasó a ser de acero en vez de latón- para facilitar la disipación del calor y la ampliación del diámetro de la tapa de entrada de agua, para permitir un relleno más rápido y añadir la posibilidad de introducir trozos de nieve directamente. La Maxim 1910 tuvo una gran andadura por el siglo XX desde que fuera adoptada por el ejército imperial ruso y utilizada en ambas guerras mundiales y posteriormente en la Guerra Fría. Al estar refrigerada por agua, permitía que en óptimas condiciones de mantenimiento la máquina no tuviera que dejar de disparar; creando barreras de fuego infranqueables para la infantería. Cuando se inició la Guerra Civil Española esta ametralladora no estaba presente en la Península Ibérica. Tras los primeros contactos entre el gobierno de la II República y la Unión Soviética de Stalin, los cargueros soviéticos trajeron una cantidad considerable de estas armas. Muy pronto y cuando estuvieron disponibles, reemplazaron a otros modelos que habían sido usados anteriormente como las St. Etienne M1907 francesas. La Maxim “de carrito”, como se la empezó a conocer, prestó un gran servicio al Ejército Popular Republicano. En numerosas instantáneas del conflicto se puede ver a soldados republicanos utilizándola. Según los estudios actuales sobre armamentística en la Guerra de España, aproximadamente 3.200 de estas máquinas llegaron al Ejército Popular. Las fechas de los envíos se alargan desde noviembre de 1936 hasta enero de 1939. Ambos bandos la consideraban una buena arma salvo por la cuestión de la ruptura, en ocasiones, de la aguja del percutor en los combates. El elevado número llegado a España no pasó desapercibido a las tropas sublevadas y más tarde al nuevo Ejército Español del régimen del General Franco. Era una época de carencias y nada se desechaba. Las Maxim M1910 que quedaron en España fueron entregadas a las Comandancias de la Guardia Civil hasta la llegada en cantidad de las ametralladoras Alfa M44 de fabricación nacional. Características técnicas;  Calibre: 7,62 mm  Munición: 7,62 x 54 R  Acción: Sistema de disparo recarga accionada por retroceso  Largo total: 1067 mm  Largo del cañón: Longitud del cañón 721 mm  Peso: 64,3 kg (sobre afuste con ruedas y con la camisa de refrigeración llena)  Capacidad: cinta de lona y metal de 250 cartuchos  Cadencia de tiro: 600 disparos por minuto  Velocidad máxima: 740 metros por segundo.